Cuba.

¿Se podría paliar la actual situación del país, ya de inmediato y al menor costo, sin esperar por los resultados de las grandes transformaciones estructurales en ciernes?

De alguna manera lo enseña el marxismo y el sentido común y hasta la lógica recreativa.

Se podría, sí, comenzando por los asuntos particulares e ir subiendo la parada, cuesta arriba

El país necesita un remojón, un poco de aire fresco en los pulmones, tomar oxígeno y entrar a 2008, sus ciudadanos,&nbsp un poco más altruistas, relajados, generosos, confiados, esperanzados y comunicativos unos con otros.

Cada cual, imagino, a estas alturas tiene su fórmula y confía en su fórmula. Pero no hay ese espacio ni ese tiempo ahora, parece,&nbsp y cada cual debe imaginarla y ofrecerla por su cuenta y riesgo. Se trata esto de una limpieza de cutis y no de ninguna cirugía radical.

Pienso que:

1)&nbsp Hay que endulzarles un poco más la vida a esos ancianos y ancianas, que se ancianizaron durante estos últimos 50, 40, 30 ó 20 años, y tiene magros retiros, y dejarles vender sus maníes callejeros, sus durofríos caseros, los cigarritos de la cuota de su libreta de racionamiento o que a su vez compran a otros que no fuman o necesitan vender sus arcaicas cuotas para sobrevivir. Igual cesar o reducir drásticamente impuestos a costureras y sus múltiples similares, que o están dentro de la ley, los menos, o se internan en los laberintos de las «ilegalidades», para sobrevivir. Coser para la calle nunca pagó impuestos.

2)&nbsp Dejar a los taxistas «por la libre», más sueltos, hasta que lleguen las yutón o las soñadas guagüitas ruteras. Esos taxistas hoy concurren desde cualquier estamento o poder adquisitivo, para incrementar los déficit de sus presupuestos y salarios familiares, al tiempo que brindan un servicio que el Estado no ofrece ni puede. Carece de Oferta y es incapaz de atender esa Demanda.&nbsp Será por ahora, pero no&nbsp puede. Y así vemos al policía más preocupado por esas ilegalidades fabricadas que por los maleantes reales. Y nada que ver con el Socialismo, que es satisfacer las crecientes necesidades de la población. Es control por control, deformando más la ya deformada y noble ocupación de policía.&nbsp Crecen así, además, la indefensión y el autoritarismo. Caldo de cultivo para inéditas corrupciones,.

3)&nbsp Dejar, caramba, que la gente se sienta dueño verdadero de sus viviendas, ya pagadas o en trámites de pagar, de sus autos, de sus motocicletas. Esas propiedades sin traspasos son un amargo nudo atravesado en la garganta y la confirmación más cotidiana de que todo pertenece al Estado. Si, por otro lado,&nbsp viene un familiar de «afuera», nacional o internacional, el huésped, además de la hospitalidad y las incomodidades, tiene que comenzar a dar carreras para «legalizar» su hospitalidad.

4)&nbsp Alquiler libre, por supuesto, sin impuestos ni persecuciones, para nacionales que viajaron por motivos equis o porque carecen de viviendas y ya es hora de tener un techo y cierta estabilidad para vivir.

5)&nbsp Rebaja de impuestos a la ventas o ganancias, no sé, aunque me lo explicaron,&nbsp y de los alquileres de los mostradores, donde cuentapropistas ofertan sus artículos a una demanda que a fin de cuentas debe costearlo todo, lógicamente y nada recreativamente. Esos precios de hoy de fruta bomba, tomates, ajo y cebolla, platanitos o calabazas, le pondrían de punta los pelos a nuestros ancestros, si lograran despegar el ojo delante de un «agro,» estatal o particular.

6)&nbsp Esto es especialmente URGENTE. Facilitar al máximo los cambios de dirección, permutas, herencias, cambios de propiedad, etcétera, que generan demoras inconcebibles, gran irritación pública, en tanto que júbilo y ajetreo entre la burocracia, caldo de cultivo entonces, incluyendo notarios, abogados y funcionarios, para la corrupción más aberrante, sin contar negocios realmente ilícitos que implican a otras esferas de la burocracia y la ciudadanía.

Atención especial a la calidad de lo servicios de salud en policlínicos, hospitales y consultorios del médico de la familia, donde ocurren a diario violaciones pequeñitas y grandes, a costa del tiempo y la salud de la población. Así como aquí falta algo de su opinión con respecto a un servicio que es conquista social, por un lado, y materia prima del triunfalismo cegato por el otro.

7)&nbsp Mejorar, mediante estudio, no hacen falta sociología ni encuestas ni especialistas, la distribución de comercio interior a las localidades y municipios cercanos a la capital. Resulta descabellado no encontrar un cepillo de dientes o una bombilla eléctrica o una plancha o una pila o un transformador en todo un municipio, digamos de 40 habitantes,&nbsp y entonces incrementar los viajes a las capitales y centros comerciales, con viajes de idas y vuelta innecesarios, inflando artificialmente la demanda de transporte y disparando sus precios. Ese es un fenómeno mundial. Lo vi, en España y en la ex Checoslovaquia. Es decir, la periferia y las localidades apartadas, estaban tan abastecidas o más que las de las capitales, para ahorrar transporte, combustible, desterrar el sentimiento de aislamiento y olvido&nbsp y ofrecer oportunidades iguales a todos. De forma similar ocurre con libros, cines, parques recreativos, asociaciones culturales, teatros, etcétera.

Aquí el Vedado, esa región céntrica de La Habana, es la meca porque ahí hay de «todo» y el paisaje se hace más apacible antes y después de la batalla.

8) En vez de la opinión, el control debería ejercitarse más en terminales de ómnibus y ferrocarriles, y otros parajes de cierta zoología, para evitar especulación y la inconformidad y desconfianza declaradas y proclamadas de la población con respecto a estos servicios.

8)&nbsp La indisciplina social debiera dejar de ser una culpa del ciudadano de a pie&nbsp y ser asimilada, por Estado y Sociedad, como un complejo de fenómenos culturales, económicos y sociopolíticos, hasta conductuales e ideológicos, provocados gradualmente por la escasez generalizada de los últimos 15 años, digamos, que convirtió además al Estado en el primer incumplidor de normas y tradiciones.

No pasa el carro de la basura, los comercios abren tarde y a veces no abren, se hacen cortes o inventarios a cualquier hora, se cierra por reparación sin aviso y no se sabe hasta cuándo, reparaciones capitales a granel y no reparación y mantenimiento cotidianos, se fue la luz, suspendieron los carnavales, cambios constantes de la programación de la TV, te atienden mal en la bodega, la farmacia, la tienda de ropa, los hospitales, en estadios deportivos, hay fosas tupidas, filtraderos de agua que no se arreglan nunca, te cortan la luz corriendo pero hay 700 apagones y nadie dice nada, si el recibo dice más cuanto, hay que pagar más cuanto, aunque no sea tanto, no hay reclamaciones, la garantías no son garantías, si el zapato se te rompe al otro día te jodiste, te cobraron de más y dieron de menos, no barren el Paseo del Prado, se demoran 8 años en reparar una calle, no hay cestos en lugares céntricos y públicos cuando alguien quiere deshacerse de un papelito o una cáscara, etcétera.&nbsp

No hay policías o sí indiferencia de los agentes del orden, cuando hay desórdenes, alborotos, ruidos altos, podas ilegales, ruidos no permitidos de vecinos, basuras o escombros depositados dondequiera, filtraciones eternas, motos y autos humeantes y escandalosos, cambios no avisados de las rutas de guaguas y de los horarios de cualquier cosa,&nbsp basureros permitidos en cualquier esquina, filtraciones públicas por donde se nos van el agua y la higiene y la calma. Infierno de bolsillo, sin Dantes para historiar, con 700 mil capítulos y círculos diferentes.

Luego del análisis, la explicación de causas y autocríticas, y cuando se inicie y avance y se palpe la recuperación, entonces es posible emplazar al ciudadano. Incluso con la ley, como medida de educación y costumbre. Y que el ciudadano, él, tú, yo, nosotros, comencemos a entender que es un deber compartido.

Echar culpas para abajo ha sido un mal de muchos años. La verticalidad de los deberes. De ahora en lo adelante, con una respuesta verdaderamente eficiente, decente, no arrogante, ideológica, política, popular, compartida, es un fenómeno que entraría en fases de recuperación.

Nadie está excluido de conformarse dentro de un espíritu solidario y socialista, ni el ciudadano ni el individuo ni la persona ni la gente ni el dirigente ni el funcionario estatal o partidario. El socialismo es de arriba y de abajo, de izquierda y derecha, de la materia y el espíritu, de capacidad de comprender y de la habilidad suprema de persuadir.

EL SOCIALISMO ES UN RECLAMO DE IMAGINACION Y AUDACIA, ADEMAS DE JUSTICIA,&nbsp Y NADIE ESTA EMANCIPADO DE PARTICIPAR EN LA TAREA SIN PONER A DISPOSICION ENTREGA Y SOBRE TODO AMOR.


Se debe incluir mayor vigilancia de los precios y pesos en los mercados de cualquier categoría, hasta que surjan soluciones de fondo.

Los buzones de quejas y sugerencias, convertidos en dinosaurios y cómplices del robo y el mal trato, son una prueba de que la burocracia no va a crear mecanismo de control de la burocracia. O no deja que ese mecanismo tenga su oportunidad.

Hay que usar la imaginación. Y l extraviado análisis crítico y autocrítico de las causas. Hay que mirar más a la luna y menos al dedo.

Necesario mantener alguna presión positiva en las relaciones entre trabajador de los servicios y clientes victimados para llevar ilusiones a esa oveja resignada que devino el consumidor. Ahora vituperado con el término de usuario. Otra tarima donde el ciudadano comprueba que no es dueño social de nada.

ACUSE DE RECIBO, del periódico Juventud Rebelde, ha hecho más por los ciudadanos del país, sus problemas y&nbsp soluciones, que muchos organismos del Poder Popular encargados del asunto. Esto subraya otra vez&nbsp la necesidad de una prensa comprometida (no solo con los sueños de triunfo, legítimos de toda causa, que sobrevendrán por el peso de acontecimientos políticos, ideológicos, económicos) sino sobre todo con la exploración y&nbsp comprensión de las dificultades y sus causas, y que luego y siempre siga de cerca las soluciones que se apliquen en un país que cruza por años y épocas de apuro y sale de ellos, con magulladuras y diversos traumatismos. Entre ellos, el de la poca credibilidad de sus medios de información.

&nbsp Nada convence tanto como las soluciones. Y ninguna solución viene echando el polvo debajo de la alfombra.

De lo que resulta más imprescindible y urgente, una PRENSA MUCHO MENOS LAUDATORIA Y MAS COMPROMETIDA y&nbsp METIDA HASTA EL HUESO en LA MÉDULA DE LOS ASUNTOS Y PROBLEMAS Y CONFLICTOS, sin permitir que la amedrenten directores administradores, jefe de información o redacción, gerentes, burocracias, funcionarios, censuras. El periodista del SOCIALISMO, igual que los dirigentes, deben ser servidores del país y la NACIÓN y orejas para opiniones, criterios y vida susurrada de la población a la que llamamos pueblo cuando se nos inflama la retórica. Paradójicamente, la autocensura a veces actúa así, es decir, como una retórica que no convence.

Casi todas estas medidas se podrían adoptar mañana mismo o el 3 de enero próximo. O en los primeros meses de 2008.

Algunas cuestan nada.
Otras cuestan poco.
Solo cuesta pensarlas y mover el brazo.
O solo indignarse con lo inertes que hemos sido,
con nuestra falta de indignación.

ES UN BOTON DE MUESTRA QUE NECESITA LA POBLACION PARA CONFIAR MAS O CONFIAR EN COSAS EN QUE YA NO CONFIABA.

Es un asunto conceptual, ideológico. De primer orden hoy, hasta que dentro de algunos días o semanas nos internemos en otros territorios más escabrosos, en el tránsito deseado de una sociedad hacia niveles superiores.

ULTIMO ASUNTO: DEBEMOS LOS CUBANOS VENTILAR ESTOS PROBLEMITAS&nbsp EN ORGANOS DIGITALES INTERNACIONALES, COMO KAOS EN LA RED, PORQUE NO EXISTEN SITIOS NACIONALES PARA VER DENTRO Y QUE PERMANEZCAN AL ALCANCE DE TODOS. ASI HAY QUE MOSTRAR LOS INTESTINOS, CON CIERTA VERGÜENZA, AL MUNDO.


¿PENSAR EN TALES Y TALES&nbsp ASUNTOS NO SERIA TAREA PERMANENTE&nbsp DE LAS VANGUARDIAS Y DE SU MAYOR OBLIGACION, EL TRABAJO IDEOLÓGICO?

Félix Guerra
POEMAS DE LA SANGRE COTIDIANA.
Diciembre 26 de 2007, Ciudad de La Habana.

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