Vallekas planta cara masivamente al fascismo pese a la represión policial
Decenas de heridos y varios detenidos en la represión policial de la masiva concentración vecinal y antifascista contra el acto de Vox en la "Plaza Roja" de Vallekas. Hasta la actuación policial, Vox no había podido realizar el acto público en el emblemático barrio obrero madrileño.
Colectivos antifascistas como ‘Vallekas Antifa’, ‘Bukaneros’ o ‘Vallekas se Defiende’ ya habían anunciado que plantarían cara al fascismo de Vox en Madrid y en la víspera habían adornado el barrio con pancartas con lemas como «Vox non grato» o «Pintando esta pancarta ya hemos trabajado más que tú» junto a un retrato de Santiago Abascal.
Sabrás de trasnochar pero no de madrugar.
Un saludo, vividor.@Santi_ABASCAL pic.twitter.com/jDuBNNDPY8
— Bukaneros (@bukaneros92) April 6, 2021
Y así es como los vecinos de Vallekas han recibido masivamente la provocadora visita de los líderes de la extrema derecha. Vallecas es un feudo de izquierdas, un barrio obrero y de mestizaje social, de estos que los ultras denominan «estercolero multicultural«. Y el movimiento vecinal y antifascista les ha dado la bienvenida que se merecían: hacerles la vida imposible. Suerte que Abascal tenía más de un centenar de agentes de policía de su lado que, como suele suceder, le han hecho el trabajo sucio.
Vallekas, vuestro «estercolero multicultural» favorito, os espera. pic.twitter.com/zpGardC2f5
— Bukaneros (@bukaneros92) April 6, 2021
Nos odian durante todo el año, por eso, en Vallekas, no son gratos.
¡SILENCIÉMOSLES LLENANDO LAS CALLES! pic.twitter.com/IcyEneQy09
— Bukaneros (@bukaneros92) April 6, 2021
¡LLENEMOS LA PLAZA ROJA!
Ante sus provocaciones y sus intentos de criminalizar a los vecinos de nuestro barrio, respondamos de forma colectiva y unitaria, como siempre ha hecho Vallekas.
Desbordémosla, que no se escuchen sus discursos de odio. pic.twitter.com/nqE4yE7jeA
— Bukaneros (@bukaneros92) April 6, 2021
Ha sido poco más de cien simpatizantes de Vox contra miles de vecinos de Vallecas. Un cordón policial han rodeado a Santiago Abascal, Rocio Monasterio, Macarena Olona, Javier Ortega Smith y toda la tropa de ultraderechistas. Han podido acceder gracias a ese enorme dispositivo policial y de seguridad dispuesto por la delegación madrileña del Gobierno español, «el más progresista de la historia». Pero no había suficientes decibelios en los altavoces para superar la potencia del ensordecedor vocerío antifascista de miles de gargantas.
Abascal ha sido el responsable de cualquier acto violento al ir a encararse con los vecinos. pic.twitter.com/9bVaQ4lGwJ
— AntonioMaestre (@AntonioMaestre) April 7, 2021
Entonces es cuando la policía ha completado el trabajo sucio. Los incidentes han empezado cuando Abascal, enmudecido por los gritos de los antifascistas, ha decidido bajar del escenario a calentar los caldeados ánimos de los manifestantes, en una calculada provocación, consciente de estar bien protegido por el cordón policial y del inevitable fracaso del acto si no lo hacía.
«Aquí están los antifascistas». Contra las provocaciones de la extrema derecha: movilización y más movilización. #Vallekas #Madrid #NoPasaran pic.twitter.com/LnXtLmV0bD
— IzquierdaDiario.es (@iDiarioES) April 7, 2021
Es esta provocación la que ha ocasionado que le lanzaran una botella de plástico, que naturalmente después ha calificado como un victimista intento de «lapidación a pedradas«. A partir de aquí, la policía ya tenía un motivo para reprimir sin contemplaciones a la multitud antifascista, a pesar de que los activistas permanecían quietos, simplemente gritando, sin intentar traspasar el cordón. A Abascal, después de su heroico gesto, le ha faltado tiempo para denunciar que sólo eran «150 policías con las manos atadas por Marlaska«.
Una vez desalojada la plaza a base de porrazos y detenciones ha sido cuando se ha reanudado el mitin. Entonces sí que se escuchaba bien los altavoces.
El balance provisional de la represión policial, según fuentes de los servicios de emergencias, es de al menos 13 personas atendidas por «brechas, abrasiones y contusiones» y dos personas detenidas, según la propia policía.
