Un subteniente del Ejército, miembro en activo de las Fuerzas Armadas, acusado de depósito de armas de guerra
Esta semana se juzgará al militar que había efectuado numerosas ventas de armas a terceras personas. Concretamente, señala la Fiscalía, se lo acusa de vender un cañón de arma corta, cinco fusiles de repetición manual, una carabina semiautomática y varias pistolas.
Los investigadores encontraron cientos de armas de distintas naturaleza que el escrito del Ministerio Público dedica nueve páginas a nombrar. «34 fusiles y rifles de diferentes marcas, automáticos, semiautomáticos, una ametralladora ligera, 16 subfusiles, 13 carabinas, 57 pistolas de diferentes marcas y calibres, cinco revólveres, 390 cargadores, 10 silenciadores, 52 cañones o 4 kilos de pólvora» son solo algunos de los hallazgos que llevarán al militar ante la Justicia.
Un verdadero arsenal de armas de guerra «que había venido acumulando a lo largo de los años y que guardaba en su mayor parte en dobles fondos de armarios o en otros huecos destinados a su ocultación».